Así como no existen personas pequeñas,
ni vidas sin importancia, tampoco existe trabajo insignificante.
Elena Bonner
Uno de los serios problemas que afrontan muchos jefes y gerentes tratando de ejercer un liderazgo proactivo, motivador, participativo y conduciendo eficientemente un equipo de trabajo, es la comunicación. Muchos no la saben manejar dando paso muchas veces a la desmotivación, la poca participación, y a los conflictos que afectan seriamente el comportamiento del grupo, más, cuando todos requieren estar informado de las decisiones que se toman y en donde está involucrado el equipo, sobre todo en participar en los planes y objetivos de la empresa.
Justamente al respecto de ello, Holmes Paz Quiñónez, señala, que ningún equipo puede surgir por sí mismo; uno debe trabajar con los empleados para comunicar y explicar algunos factores:
- Cómo espera que trabajen,
- En que difiere el nuevo método de funcionamiento respecto al que estaban acostumbrados,
- Dónde pueden solicitar ayuda,
- Cómo funcionará el nuevo equipo al trabajo
Es fundamental saber comunicar, guiar y facilitar, y no solamente concretarse en dirigir el trabajo de su equipo. La comunicación en la organización, juega el mismo papel que la sangre en el cuerpo humano, viaja y deja su información en cada célula de la empresa.
No es menos considerar los problemas de comunicación que se presentan frecuentemente en un equipo de trabajo, generalmente debido a la personalidad y emotividad de cada uno de sus integrantes. Estas dificultades individuales y grupales deben ser identificadas por el líder y analizadas por todos oportunamente de manera seria y responsable. Hay aspectos de actitudes y comportamientos de comunicación que generan entropía en el interior del grupo tales como:
- El infantilismo
- El sentimentalismo
- La histeria
- El egocentrismo
La aplicación de la Ventana de Johari permite y facilita el descubrimiento individual y grupal de estos y otros problemas que pueden llevar al deterioro de las relaciones en el equipo. La gerencia debe estar atenta en la forma como se está comunicando, que realmente se logra de ella, como incide en el comportamiento del equipo de trabajo, como percibe el grupo la comunicación.
El arte y la técnica de la comunicación supone una profunda actitud de cambio. Este cambio debe ser promovido por el líder o administrador que, si es necesario, requerirá el asesoramiento de Psicólogos o especialistas en el tema.